Nuevamente el país está inundado. Y entre aguacero y aguacero, ríos desbordados, hectáreas inundadas, damnificados a tutiplén, animales sin donde pastar, carreteras desaparecidas, los noticieros se olvidaron de informarnos como va el escándalo de Sammy con su carrusel que por cierto se va moviendo al ritmo del NULEtazo del momento: Hay que pagar pa contratar. Así que descubrimos el agua tibia. Esa es una de las situaciones que me hacen decir: YALOSABÍA. Prosigo: con la ola invernal, también pasó a segundo plano la investigación los funcionarios del Min Protección que montaron todo el andamiaje para robarse la plata de la salud de los colombianos. Por allá los tienen en unos pabellones especiales pa los ladrones de cuello blanco. Esos son los que deben meter en los patios comunes y corrientes, esa es la gente que es peligrosa pa la sociedad: los que se roban los dineros públicos y más si es de salud, pa mi son unos asesinos de oficina. Así que les debe caer el peso de la ley sin ninguna contemplación. Con la salud no se juega, ni con la educación, ni con nada, que paguen carajo.
A raíz del escándalo de la salud el Min Protección decretó la nueva UPC para el año 2011. Me dio tristeza, vergüenza, rabia, impotencia de ver como en Colombia la salud de nuestra gente no pasa de ser un vil negocio. Pues bien, la UPC pa los del régimen contributivo quedó en 500.583 pesos y pa los del régimen subsidiado quedó en 302.040 pesos. Allí es donde yo pongo el grito en el cielo. ¿Cómo así? Los subsidiados=vulnerables=pobres tienen menos derecho tan sólo por su condición económica? Es decir Usted señor subsidiado siéntase agradecido con el gobierno municipal porque destina 300 y punta pa su salud anual de los cuales su ARS se encargará de darle solo una consulta externa durante el año y pelee luego pa que le aprueben un pinche hemograma. País mal hecho, la salud no distingue si Usted es rico o pobre. Abajo esa maldita UPC, ya es hora de que nuestros congresistas se pongan las pilas y legislen sobre lo que verdaderamente necesitamos: una nueva ley de salud donde haya un régimen ÚNICO, un servicio integral para todos y que al menos en salud no haya ciudadanos de segunda clase. Si hay plata pa la salud, Villa Bacteria es la prueba, corrijo Villa Valeria.
Ya no veo que en las noticias se le de tiempo para mostrarnos como avanza el proyecto de ley que reformará la educación, como va la ley de la restitución de tierras, ni siquiera a algo tan trascendental como la ley de cadena perpetua pa los violadores tuvo realce.
Conclusión: con este mini diluvio serán muchos los goles que nos van a meter y después pasará lo mismo que con SEACOR: clavo pasao.