El miércoles de la semana pasada se llevó a cabo en el salón de la FSI una Sesión Informal de la Asamblea de Córdoba, donde se trató el tema de regalías suspendidas en los municipios de San Carlos, Ciénaga de Oro y por supuesto Montelíbano. El señor Arbey Avendaño quien vino de allá de Planeación Nacional, palabras más palabras menos dijo que el Consejo de Estado “tumbó” los planes de desempeño y en que en ese nuevo escenario, el plan de desempeño presentado por Montelíbano quedaba sin piso jurídico justo en el momento en que iban a soltar un billete largo.
A mi me quedó claro que el municipio de Montelíbano ha hecho la tarea para que suelten las regalías. Tal como lo vi yo, allá en Planeación Nacional ni siquiera tienen claro como es que deben hacer los municipios pa que les entreguen esas platas retenidas. Mucha palabrería y el hueco fiscal se sigue agrandando porque tal como dijo el Dr. Rangel, por no hacer unos pagos a ISA, el municipio está pagando unos intereses altísimos que a la larga nos perjudica a todos porque es plata que se deja de invertir en los sectores prioritarios.
Después de toda una extensa Sesión de la Asamblea se acordó en crear una comisión para ir a Planeación a gestionar el descongelamiento de los recursos, porque imposible que con estos calores todavía esas platas estén congeladas en los bolsillos de los cachacos que al parecer no las quieren aflojar. Esto me huele mal. Estos cachacos también tienen su guardado, se acordarán de mí.
Agosto es el tiempo de los buenos vientos y las cometas. Buenos vientos como los que han soplado por los lados de la Alcaldía Municipal donde -según me contaron- están más contentos que marrano estrenando lazo. ¿El motivo? Pues que el alcalde Edinson Rangel salió victorioso de la audiencia relacionada con la construcción de las letrinas de El Anclar y sus alrededores. Eso lo sabía yo antes que el juez diera el fallo. Digamos que uno ya está curtido en estos menesteres de la cosa pública y el resultado a favor del alcalde era de esperarse, aunque en el fondo me hubiera gustado que nuestra justicia por primera vez no cojeara. Lo que tengo claro es que ese contrato de las letrinas se hizo con recursos de regalías cuando esa fuente ya estaba suspendida, pero en realidad no conozco más detalles sobre ese contrato, porque la información que manejo es la que circula de boca en boca y no es tan confiable como para hacer alguna precisión al respecto.
Para despedirme les cuento que por ahí dizque tienen unas grabaciones con mi voz. Resulta que me han “chuzado”. A lo que ha llegado el mundo, ahora chuzan a los más llevaos. Bendito sea el Señor.